CASA SINGULAR EN UN ENTORNO NATURAL PRIVILEGIADO

La propiedad está ubicada en paraje natural de gran belleza, lindado con el río Júcar. Dispone de 16 ha. de terreno de tierra cultivable y espaciosas zonas ajardinadas y terrazas frente a la vivienda principal.

La construcción cuenta con 293 m² y ha sido reformada en su interior a partir de una antigua “casa cueva” edificaciones tradicionales de la comarca, que se construían junto a las grandes paredes de roca de las montañas circundantes.

Los espacios interiores son amplios y cuentan con luz natural gracias a un patio interior que sirve como distribuidor de las estancias. En la planta baja cuenta con un salón con chimenea, sala de estar, cocina, 3 dormitorios y dos cuartos de baño. La planta superior alberga una gran terraza, zona de estar, 2 dormitorios y un baño.

Próxima a la construcción principal, se ubica otra construcción de 140 m² que se utilizaba como cuadras y estancias para animales y que actualmente sirve como zona de almacenaje.

Cuenta además con varias terrazas y zonas de estar en el exterior con cenadores y jardines que rodean la construcción.

La propiedad dispone de agua de pozo propio legalizado para extracción de 1.000 metros cúbicos al año. La energía se obtiene mediante placas solares que puede apoyarse por generador; cuenta con fosa séptica y calefacción central de gasoil.

Las casi 16 hectáreas de terreno con que cuenta la propiedad tienen una orografía suave, siendo una de sus lindes el cauce del río Júcar.

Esta singular propiedad se sitúa en la llamada hoz del Júcar, una comarca llena de contrastes que ofrece un entorno natural cambiante a lo largo de las estaciones, con bosques de pinos, encinas y sabinas y singulares viviendas construidas junto a las escarpadas laderas.

Una comarca donde el río marca la orografía, con tramos de bruscos meandros pasando entre cañones, zonas de cultivo y encantadoras villas medievales como Alcalá de Júcar o Jorquera, que se encuentra a sólo 12 km. de la propiedad.